Duramente, los jóvenes tenemos en frente la chocante realidad con aquello que nos enseñan en los primeros años escolares de que “naces, creces, te reproduces y mueres”, puesto que parecería que es justamente lo que nos toca… Estudiamos, nos formamos, nos graduamos y luego ¿Qué?
Por: Joeslina Javier
Duramente, los jóvenes tenemos en frente la chocante realidad con aquello que nos enseñan en los primeros años escolares de que “naces, creces, te reproduces y mueres”, puesto que parecería que es justamente lo que nos toca… Estudiamos, nos formamos, nos graduamos y luego ¿Qué?
La carencia de oportunidades y falta de empleo para la juventud es como una ola que se agiganta hasta volverse un tsunami, del cual difícilmente se escapa ¿Habrá alguna solución para esta problemática existente?
Generalmente, estamos luchando por nuestros ideales, enfrentándonos diariamente a desafíos que nos impulsan a buscar la forma de oportunidades, de abrirnos paso, de tener verdaderas bases de desarrollo. La poca participación en la toma de decisiones, es, por otro lado, algo que sin duda alguna nos afecta; el desempleo, el subempleo, el no encontrar puestos decentes, son algunas de las cosas que impiden el mejor provecho de nuestro potencial.
Sin darse cuenta, están excluyendo a los jóvenes, y esto hace que poco a poco se pierda la confianza en instituciones democráticas; el desafío social y económico dejará de ser sostenible si no se crea el compromiso político de generar nuevas oportunidades para la juventud.
Este es justo el momento de comenzar a apoyar el espíritu emprendedor de los jóvenes, hacer del empleo juvenil una agenda social, formación de nuevos líderes, integración real a la política, contar con la confianza y respaldo de quienes pueden abrirnos puertas y posicionarnos en un lugar preeminente, son las preocupaciones de ingeniero Federico Antún Batlle, presidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).
Por eso, los jóvenes creemos que tenemos una nueva esperanza, y nos sumamos en apoyo a este nuevo comienzo, junto a “Quique”; y al fin, la falta de oportunidades y empleo en la juventud dominicana llegue a su ocaso.