Nuevos aires se respiran dentro del Partido Reformista Social Cristiano desde que Federico Antún Batlle (Quique) asumió la Presidencia del Partido, esto lo ha logrando con una gran dinámica de trabajo permitiéndole conectar con la dirigencia de la organización a nivel nacional, tanto así que mediante la aprobación unánime de todos sus dirigentes, ha declarado la independencia política de los reformistas con miras a presentar candidaturas propias en la contienda electoral del año 2016.
De forma inmediata, los sondeos le han dado la razón a esta decisión del reformismo anunciada por el Presidente Antún, lo que demuestra que esta acción de renovar el partido a partir de la restauración de su identidad no es producto de la improvisación, sino más bien de un plan pensado, inteligente y oportuno, en el que se valora más el compromiso con la democracia dominicana, restableciendo la credibilidad del Partido Reformista frente al electorado dominicano que aspira tener una opción diferente, en la que puedan encontrar una nueva línea de dirección que conduzca de manera más justa e idónea el destino de la nación.
Nuevos aires se respiran dentro del Partido Reformista Social Cristiano desde que Federico Antún Batlle (Quique) asumió la Presidencia del Partido, esto lo ha logrando con una gran dinámica de trabajo permitiéndole conectar con la dirigencia de la organización a nivel nacional, tanto así que mediante la aprobación unánime de todos sus dirigentes, ha declarado la independencia política de los reformistas con miras a presentar candidaturas propias en la contienda electoral del año 2016.
De forma inmediata, los sondeos le han dado la razón a esta decisión del reformismo anunciada por el Presidente Antún, lo que demuestra que esta acción de renovar el partido a partir de la restauración de su identidad no es producto de la improvisación, sino más bien de un plan pensado, inteligente y oportuno, en el que se valora más el compromiso con la democracia dominicana, restableciendo la credibilidad del Partido Reformista frente al electorado dominicano que aspira tener una opción diferente, en la que puedan encontrar una nueva línea de dirección que conduzca de manera más justa e idónea el destino de la nación.
Decididos a corregir los errores del pasado, y de asumir con humildad el firme compromiso de construir un Partido Renovado, el Presidente del PRSC ha declarado que esta organización actuará decidida a conquistar el pueblo dominicano, instando a toda su dirigencia a practicar la ética, la unidad interna, la coherencia, la confianza, la transparencia y la credibilidad para alcanzar el poder y gobernar para todas y todos sin exclusión ni discriminaciones.
Además para ello, el Presidente de los reformistas nos hace reflexionar en los problemas fundamentales que afectan el país, pone como norte del PRSC puntos que han dejado de existir en la mente de la clase política dominicana como la solidaridad, el bien común, la defensa de la soberanía nacional, la dignidad y el bienestar de las personas, el necesario fortalecimiento del sistema democrático, y el porvenir de la familia dominicana, que es el núcleo social más golpeado producto de la crisis de valores que sufre la sociedad, así como la desigualdad y el desempleo del cual se derivan tantos males.
Es seguro que esta decisión de independencia aprobada por las autoridades del reformismo e impulsada por su Presidente, tendrá oposición y habrá manifestaciones de desagrado por parte de sectores que no quieren ser desalojados de las instancias de poder, donde disfrutan de grandes oportunidades y privilegios en detrimento de las mayorías de dominicanos que ven sucumbir la posibilidad de ver realizadas sus legitimas aspiraciones de tener un techo propio, servicios de salud eficiente, y vivir de forma digna, hecho que hoy no se refleja por el alto costo de la vida.
La anunciada Independencia de los reformistas es un oasis en el desierto que genera esperanza, y un bálsamo que servirá para reforzar las garantías perdidas de una sociedad que no encuentra eco en la solución de los agobiantes problemas que acarrea la administración exclusiva del Estado Dominicano, producto de que nadie por sí solo ve sus errores y al no tener interlocutores que digan cuales son y cómo se solucionan esos errores, la equivocación continúa haciéndose permanente, llevando el dolor y el sufrimiento a las grandes mayorías.
Como bien lo dijo el Ing. Federico Antún conforme a las enseñanzas dejadas como legado para la nación por el Dr. Joaquín Balaguer, los reformistas están consientes que el Estado y el Gobierno deben ser vistos como una expresión inclusiva de todos los ciudadanos, y haciendo este señalamiento abre las puertas a la cohesión de los dirigentes reformistas que ocupan puestos como servidores públicos de la nación dominicana, quienes desde ya han manifestado su alto compromiso de que esas posiciones no sirvan de eje transversal para obstaculizar que el PRSC pueda lograr sus objetivos de independencia para conquistar el poder.
El Partido Reformista con su nuevo liderazgo es causa de inconformidades para el sector oficial, por lo que su dirigencia debe preparase para arduas contiendas, tanto en el orden político como en el orden personal, debido a que el reformismo es bueno cuando sirve para ayudar a otros a conquistar el poder, pero no los es cuando decide trillar su propio camino, de modo que esta bueno de ayudar sin recibir, pues es tiempo de asumir el compromiso que tienen de ser el soporte del pueblo humilde y pobre del país.
Nadie ha dicho que será fácil romper las ataduras que han atado al reformismo por dos décadas, pero como un coloso que ha dormido y se levanta robustecido con las traiciones y quejas para ser más fuerte, así deben hacer valer los reformistas su independencia política, que es la única que les garantiza tomar el control de su propio destino en un nuevo comienzo.
Los reformistas deben unirse para asumir este gran reto de independencia política, seguro tratarán de sacarlos de concentración, desde ya se ven voces que buscan descalificar a su más alta dirigencia con calumnias, mentiras, injurias, y acusaciones sin fundamentos, pero nada de eso debe distraer su atención, deben continuar la marcha que han iniciado en toda la geografía nacional organizando el partido como lo han vendido haciendo, y fortaleciendo la organización con las juramentaciones masivas de miles de jóvenes que buscan un cambio, así como una organización sin contaminación que les permita hacer una carrera política.
Tampoco pueden los reformistas desdeñar el gran sacrificio que encarna su Presidente el Ing. Antún Batlle, sobre todo porque en sus hombros, por ser la cabeza que dirige, descansa el peso de todas las culpas acumuladas por el reformismo, que no son exclusivas de él, además que sobre su persona lloverá improperios de los cuales no es merecedor, así las cosas deben estar todas y todos los reformistas dispuestos a defender el honor de quien les dirige, pues si no lo hicieran es lo mismo que dejaran perecer la iniciativa de independencia que conducirá al poder a las diferentes generaciones que hoy coinciden de manera favorable en la organización.
Todos los reformistas deben ser parte de este gran sacrificio, pues no hay nada que llene más de gloria al ser humano que no sea la libertad conquistada con esfuerzo, dedicación y trabajo, consecuentemente en este reto asumido por el Presidente del PRSC y abrazado por los reformistas no debe existir temor ni miedo, por lo que deben estar consientes de que no hay éxito sin sacrificio y que todo sacrificio tiene su recompensa, así en vez de masacre para el pueblo, construirán un modelo de gobierno en el que florezca la hermandad e igualdad entre todos los dominicanos de buena voluntad.
Por: Ramón Féliz Madera