En nombre de la familia reformista y en el mío propio, expreso nuestra mas sentida condolencia por el triste fallecimiento del arzobispo emérito de la Arquidiócesis de Santiago, monseñor Juan Antonio Flores Santana, acontecimiento infausto que nos conmueve  y nos llena de congojas por esa dolorosa pérdida que aflige a todo el pueblo dominicano, en razón de la calidad humana del ilustre fallecido y los eminentes servicio que durante su fecunda vida sacerdotal brindo a la iglesia y a toda la comunidad nacional de manera  inmarcesible.

En nombre de la familia reformista y en el mío propio, expreso nuestra mas sentida condolencia por el triste fallecimiento del arzobispo emérito de la Arquidiócesis de Santiago, monseñor Juan Antonio Flores Santana, acontecimiento infausto que nos conmueve  y nos llena de congojas por esa dolorosa pérdida que aflige a todo el pueblo dominicano, en razón de la calidad humana del ilustre fallecido y los eminentes servicio que durante su fecunda vida sacerdotal brindo a la iglesia y a toda la comunidad nacional de manera  inmarcesible.

Monseñor Juan Antonio Flores, durante todo el trayecto de su magisterio sacerdotal, fue un defensor irreductible de los valores morales y espirituales en los cuales se cimentaba la iglesia para el desempeño de su elevada misión, sus dotes intelectuales lo convirtieron en una fuente pródiga en la cual abrevaron su sed amantes de conocimientos, creyentes consagrados y laicos comprometidos. Fue un virtuoso amante de la iglesia y devoto de la Virgen María, a la que siempre veneró y reverenció en todo el recorrido de su vida.

¡Paz a sus restos!

Ing. Federico Antún Batlle

Presidente.