SANTO DOMINGO.- El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) calificó como un “exceso brutal” y un atropello inaceptable el allanamiento a la residencia del dirigente de esa organización, doctor José Tabaré Rodríguez, en Mao, Valverde.
El PRSC manifestó que no se justifica el aparatoso movimiento de tropas policiales que se utilizó alrededor de la vivienda del prestigioso médico y dirigente reformista.
En una nota de la Secretaría de Comunicación de la organización política, el partido colorao expresa que “esa barbaridad que se cometió contra un médico y dirigente político no tiene explicación ni justificación”.
Sostuvo que al tratarse de una persona archiconocida en su provincia y toda esa región, porque es un médico de larga data que ha trabajado siempre a favor de su pueblo y ha sido director del Hospital Regional Luis L. Bogaert, de Mao, además de político y exdiputado, “no debió dársele ese maltrato, el cual ha sido rechazado por toda la sociedad”.
Indicó en ese sentido, que si las autoridades requieren de su presencia para aclarar cualquier situación, “lo lógico y razonable es que lo citen o lo convoquen debidamente, “y de seguro que él acudirá a la entrevista”.
El Partido Reformista resaltó que este tipo de exceso y atropello no puede continuar cometiéndose, por el daño que le hace al gobierno y al mismo Ministerio Público.
“Este tipo de acontecimiento tan desafortunados, generan mucho malestar en la sociedad dominicana, por lo que exhortamos a la la Procuraduría General de la República investigar a estos fiscales que están cometiendo estos excesos”, apuntó.
Resaltó las cualidades profesionales, políticas y morales del doctor Tabaré Rodríguez.
El Senador por La Vega, Ing. Ramón Rogelio Genao, consideró ayer, que en la Suprema Corte de Justicia (SCJ) hay cinco jueces que debieron ser evaluados, porque sólo completaban el tiempo de sus antecesores y que el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) puede llamar a postulantes del Tribunal Superior Electoral (TSE) ya que los miembros están caducos por coincidir con el periodo constitucional presidencial y congresual.
Explicó que se ha creado una disparidad por lo que el Consejo Nacional de la Magistratura debe hacer una sesión para clarificar esta situación, que provoca una jurisprudencia no sana.
Según Genao, los jueces Blas Fernández, Pilar Jiménez, Alexis Read, Moisés Ferrer, y Francisco Ortega debieron ser evaluados en el año 2017, lo que no se produjo; estos debieron salir con Mariano German o haber sido electos por un nuevo periodo de 7 años como manda la Constitución.
“La Suprema Corte tiene un solo turno, a diferencia del Tribunal Constitucional, que, desde la reforma del 2010, se establecieron 3 turnos en el origen: uno de 6 años, con derecho a reelección; otro de 9 años que es el período normal del Tribunal Constitucional y otro que por excepción iba a tener un periodo de 12 años”, dijo.
El congresista reformista indicó que en el caso de la Suprema Corte de Justicia no existen turnos, sino que el período lo marca quien lo preside, que es de 7 años.
Rogelio Genao advirtió que como Partido Reformista Social Cristiano están solicitando que sean revisados estos criterios, tanto para la SCJ y el TSE.
SANTO DOMINGO.- El presidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) declaró que ve con simpatía el acuerdo a que arribaron el presidente de la República, Luis Abinader, y su homólogo de Haití, Jovenel Moise, por su carácter histórico y trascendente, el cual fue anunciado ayer martes por el canciller Roberto Álvarez en un acto celebrado en el Palacio Nacional encabezado por el Jefe del Estado.
Quique Antún dijo que los temas acordados entre los dos mandatarios se corresponden con las recomendaciones que en varios momentos ha planteado públicamente el PRSC, por lo que entiende que este acuerdo es un paso de avance “porque se trata del inicio de la implementación de una política pública respecto del vecino país”.
Exhortó a las autoridades dominicanas a que en esa misma armonía y propósito, deben estar vigilantes permanentemente “para poder llevar a feliz término un proceso de definición y control migratorio que beneficie a ambos países”.
Insistió en que “hay que mantenerse vigilante y ojo avizor ante la comunidad internacional y el propio Estado haitiano, para asegurar que contribuyan a crear las mejores condiciones para gestionar un problema migratorio que posteriormente pueda degenerar en situaciones lamentables”.
El líder reformista entiende, sin embargo, que ya era tiempo de tomar una acción decidida en la dirección de controlar los flujos transfronterizos, “en ánimo de preservar nuestra soberanía e integridad nacional”.
Consideró como acertada la decisión de establecer un marco de cooperación entre los dos países para iniciar un proceso de dotar de identidad legal, con documentación haitiana, a los nacionales de ese país que se encuentren en territorio dominicano de forma irregular.
Sugirió definir un mecanismo institucional que permita realizar tal proceso, sin menoscabo de nuestra soberanía y nuestro andamiaje jurídico e institucional, habidas cuenta de que la gran mayoría de los nacionales haitianos que se encuentran en territorio dominicano, carecen de documentación haitiana, lo que les hace tener un estatus de ilegalidad en nuestro país. Este es un aspecto que debe ser clarificado en este acuerdo pactado entre las dos naciones.
El presidente del PRSC manifestó que ello contribuirá grandemente, no solo a controlar la migración irregular, sino, también, a establecer mayores y mejores controles migratorios, en una frontera abierta, porosa y débil de 292 kilómetros.
Quique Antún dijo que se identifica con el anuncio de estimular la construcción de hospitales en el lado haitiano, para asegurar que el sistema de salud del vecino país pueda dar los servicios de salud a las tantas embarazadas haitianas que cruzan al lado dominicano a dar a luz, demandando más de 5 mil millones de pesos al año del presupuesto nacional.
“Desde hace un tiempo habíamos propuesto que la comunidad internacional participe en un programa efectivo de construcción de infraestructuras sociales en el vecino país”, dijo.
Señaló que este acuerdo trascendental leído por el canciller Roberto Álvarez “abre la posibilidad de hacer realidad algo que hemos propuesto públicamente desde hace varios meses: la factibilidad de la construcción de una barrera física, que ponga un alto a la migración irregular desde Haití y disminuya la evasión de los controles fronterizos”.
Explicó que construir un muro implicaría una inversión de unos 42 mil millones de pesos dominicanos, “cifra que se recuperaría en un período no mayor a cinco años, si valoramos que actualmente el Estado invierte poco más de 5 mil millones de pesos anuales para proveer servicios de salud mujeres haitianas; 3 mil millones de pesos para darle servicios educativos a los estudiantes haitianos y 17 mil millones para las labores de seguridad y protección fronteriza”.
Tras reiterar la simpatía con los temas acordados con el vecino país, el presidente del PRSC llamó a todas las fuerzas progresistas y nacionalistas del país, a mantenerse vigilantes en el proceso de aplicación de estas medidas que han sido anunciadas.
Igualmente resaltó que era tiempo de tomar una acción decidida para fortalecer una relación productiva y beneficiosa a ambos países, “no solo en materia migratoria, sino también, económica, social y política”.
“Estos temas acordados con el gobierno haitiano, contribuyen a generar un clima de entendimiento y colaboración mutua de cara al desarrollo de ambas naciones, en un marco de respeto”, agregó finalmente.
SANTO DOMING0.- El presidente del Partido Reformista Social Cristiano, Quique Antún, sugirió la implementación de un plan de formación dirigido a los miembros de la Policía Nacional en el que sean capacitados o entrenados sobre el trato que deben dar a los ciudadanos, al tiempo que felicitó al gobierno por la mejoría de las condiciones de los agentes integrantes de la institución del orden.
El presidente del PRSC dijo que la capacitación es fundamental ante los frecuentes enfrentamientos que se producen entre ciudadanos y agentes policiales.
“Sugerimos un plan de formación intensivo que contribuya al conocimiento de cómo tratar al ciudadano y sobre todo de someterlo a la obediencia en esta época en que se ha perdido el respeto a la autoridad”, agregó.
Quique Antún resaltó que debe ser un plan de formación simple “pero intenso”.
“Debe recuperarse el respeto a la autoridad”, manifestó finalmente en su cuenta de Twitter.
-Afirma que no actúan a tiempo vendrá la incertidumbre y el caos “y perderemos los valores que nos definen como nación”-
SANTO DOMINGO.- El presidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) llamó al gobierno del presidente Luis Abinader a enfocarse en detener la inmigración “masiva e irregular” de haitianos, la que dijo pone en peligro la soberanía nacional.
Quique Antún explicó que si las actuales autoridades no actúan a tiempo ante este grave problema que enfrenta el país, “se nos vendrá encima la incertidumbre y el caos, y perderemos los valores que nos definen como nación”.
“Si seguimos de permisivos, aceptando la masiva inmigración ilegal haitiana con todas sus consecuencias, para luego dotarles de documento de identidad a costa del presupuesto nacional, muy pronto tendremos los espacios de Poder copados por ellos, modificando nuestra Constitución, nuestras leyes e instituciones, para que un haitiano dirija los destinos nacionales”, agregó.
El líder reformista apuntó que “eso no debemos permitirlo” y se preguntó a seguida: ¿Acaso es eso lo que nos enseñaron nuestros Padres de la Patria, Duarte, Sánchez y Mella? ¿Son esas prácticas y valores sociales las que vamos a dejarles a nuestros descendientes?. ¿Acaso seguiremos permitiendo que esas acciones anómicas y anómalas continúen permeando nuestra sociedad, sustentada en valores cristianos, hasta llegar a socavarla?
Explicó que actualmente la República Dominicana sufre una especie de invasión pacífica de parte de la población haitiana, y han logrado insertarse en todos los sectores de la sociedad.
En ese sentido, manifestó que hasta finales del siglo XX, los haitianos solo se veían en las actividades agrícolas en provincias específicas, fundamentalmente en zonas cañeras y cafetaleras, y tímidamente en el sector de la construcción.
“Hoy, la población haitiana está presente en todas las actividades productivas del país; y ya permean nuestras sanas costumbres sociales y culturales”, señaló.
Indicó, además, que esa migración masiva e irregular ha traído al país aspectos negativos en la salud, en lo ético y moral, “en las prácticas socio culturales y en nuestra composición demográfica”.
El presidente del Partido Reformista entiende que ante esta realidad descrita, “lo menos que debemos hacer como Estado, es establecer una nueva y estricta política migratoria, por vía de la cual impongamos fuertes controles fronterizos y migratorios, en una frontera abierta, porosa, débil, con escasos controles, entre dos países con diferencias históricas que han sido tierra fértil para el conflicto”.
Quique Antún defendió la construcción de un muro fronterizo, que según explicó, implicaría no sólo levantar una barrera física, sino también, “de un muro de oportunidades sociales y económicas; que se conviertan en contención y regulación del paso de haitianos hacia nuestro territorio”.