EL PRSC SE REAFIRMA EN SUS BANDERAS
Por Nilo De La Rosa
Cumpliendo con su estatuto, el pasado 25 de septiembre el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) clausuró su VI Congreso Dr. Joaquín Balaguer bajo el lema de “un nuevo orden: un nuevo partido”. En un vistoso, pero al mismo tiempo sellado de la sobriedad conservadora típica del balaguerismo, el PRSC entregó a la sociedad dominicana las conclusiones del proceso de consultas a su militancia en todo el territorio nacional a través del tesonero trabajo llevado a cabo por la comisión organizadora presidida por el diputado y vicepresidente del partido Máximo Castro Silverio. El acto político también contó con las explicaciones y detalles del producto final a cargo del senador y secretario general del partido Ramón Rogelio Genao, la arenga motivadora del expresidente de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) el mexicano Manuel Espino, así como las palabras centrales por parte del presidente del partido Federico Antún Batlle.
El Congreso Dr. Joaquín Balaguer, particularmente en esta última versión, se constituye en una herramienta ideal para la constante conexión y reconexión del PRSC con la sociedad dominicana, de la cual procede y a la cual sirve con devoción desde el mismo momento de su fundación en 1963. Una vez más y fieles a nuestra doctrina demócrata cristiana, los Reformistas consolidamos nuestra ubicación en el eje central de los más legítimos derechos e intereses nacionales del pueblo dominicano en su integralidad, y no en los intereses particulares y egoístas de facciones y grupos determinados. Con la sexta versión del Congreso Dr. Joaquín Balaguer, el Reformismo resiste de forma estoica ante las pretensiones de algunos individuos y organizaciones que en los últimos tiempos han impulsado su destrucción como última barrera de la defensa nacional, a través de su desconsideración ilegal en la boleta electoral, su fragmentación interna o su encuadramiento en discursos políticos extremistas para desconectarlo de forma definitiva de la mayoría del pueblo dominicano.
El PRSC, una vez más y consciente de sus logros y desaciertos humanos, desoye las voces aventureras, tanto externas como internas que cada cierto tiempo se asoman para intentar arrastrarlo a desafortunados rincones de radicalismo y sectarismo en nada relacionados con la democracia cristiana y la impronta centrista de los gobiernos del Dr. Joaquín Balaguer, quien gobernaba con todo, con todos y para todos. El Reformismo, en cierto sentido como la Iglesia ha hecho durante dos milenios, ha mostrado el interés de cambiar sus formas y métodos, al tiempo que se reafirma en sus eternas banderas políticas doctrinarias y programáticas: 1) La patria contra la invasión; 2) La cultura de la vida contra la cultura de la muerte; 3) La protección de la familia contra la degeneración social; 4) El medioambiente contra la depredación; 5) La libertad individual contra la opresión colectivista; 6) La austeridad contra el despilfarro; 7) La estabilidad conservadora contra la agitación demagógica; 8) La decencia contra la indecencia; 9) El centrismo contra los extremismos; 10) El orden contra el caos; 11) El bien común contra el egoísmo de grupos y; 12) La civilización cristiana contra la nueva barbarie disfrazada de progresismo.
De esta forma, el PRSC consolida su ubicación en el mismo centro los intereses nacionales de la República Dominicana y de la dignidad de la persona humana. El VI Congreso Dr. Joaquín Balaguer ha sido una reafirmación del PRSC como un verdadero partido de centro humanista y demócrata cristiano patrimonio del pueblo dominicano, creado por el pueblo dominicano y pensado para todo el pueblo dominicano, y no para una parte o una franja de éste. Un pueblo con el cual el PRSC busca honestamente una reconexión seria y efectiva, no como un simple partido electoral, sino como un partido realmente político.